A su vez, ligada a la resistencia esta mi cabeza, y sin duda confío mucho en ella, cuando hago cosas así me mentalizo desde un primer momento, y según van trascurriendo las horas, mi cabeza esta mas despejada y se encuentra mas fuerte, y sumado a lo cabezón que soy, cuando entre en un punto de concentración y tengo que llegar a un objetivo, mientras no lo consigo no paro, y mientras avanzo soporto lo que me venga sin dejar de avanzar, así es como peleo con mis dolores, y sobre todo con las ideas que puedan surgir de carácter negativo, en esos momentos mas que nunca se lo que valgo, y me demuestro a mi mismo lo que me merezco para ir y conseguirlo, por muy lejos o duro que sea el reto.
Cuando todo acaba, los dolores que durante el proceso estaban presentes, se hacen mas fuertes e incluso en ocasiones insoportables, pero en mi cabeza, la satisfacción personal que siento y sobre todo mi sonrisa delatadora, me demuestran que eso es mayor que todo lo demás, y es lo que me hace continuar trabajando en lo que mas me gusta, en volver a buscar esas sensaciones.
No se que ocurrirá el día seis de agosto en calella en el challenge, cuando me tenga que enfrentar a los 3.8km nadando, a los 180km en bicicleta y los 42 corriendo, pero de lo que estoy seguro, es que como en cada entrenamiento me dejare el alma y la piel, confiando en mi resistencia y sobre todo en mi cabeza, si creo en ello puedo, y si puedo, haré todo lo que tenga que hacer para conseguirlo, para cruzar esa meta .
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